A un cobarde

Por Joaquín Astarloa.

Creíste ser libre perenne,

grato portador de un sueño,

mas apresado te tienes

por reprimir el empeño.

 

Pretendes hablar de soltura;

que la vida es melodía

de experiencia y aventura.

¡Qué notoria hipocresía!

 

Me entristece ver el cambio

de un llamado bondadoso

por la ignorancia del sabio

(más que prudente, tramposo).

 

Buscarás, sin encontrar,

coartada que sea precisa;

que amerite abandonar

la mejor de las sonrisas.

 

Piensa, y más de una vez.

Si analizas cada huella

verás cuán utópico es

vivir tranquilo sin ella.

 

No creeré en tu fortaleza

si niegas retarte a duelo

con la agobiante maleza

que te impide pisar suelo.

 

Al alcanzar tu destino,

quizás llegues a entenderlo:

ser feliz en el camino

ciertas veces es “no serlo”.

 

Joaquín Astarloa

18 años

Estudiante de Derecho

joaquin_astarloa@hotmail.com