Por Juan Cruz Benayas Drogo.
Buscando la satisfacción
de una alma madre
intuición sin peligro
de extinción
Santos pensamientos
de una mente en guerra,
suaves colores
que ahuyentan fantasmas
Cientos de formas,
millones de signos
para describir
un solo segundo
Si fueras mía,
me librarías
de tanta oscuridad
Tan bien se siente
tenerte en frente
ojos de agua transparente
Dulces caricias
tan cerca de mi boca
iluminan mi tierra
La calma ahora es mía,
gracia pacífica,
canciller de mis pecados
acompáñame a la eternidad
Juan Cruz Benayas Drogo (21)
Estudiante de Abogacía
benayasjc@gmail.com