Por Daniela C. Mazza.
Ya no llores, estoy bien. Aquí me siento fabuloso. Ya no estoy enojado como antes; entendí que había llegado el momento.
Lo único que lamento, son tus ojitos negros inundados y asustados; tus manos temblaban tanto. Yo te estaba observando, sentado junto a ti en la vereda. Quería que supieras que siempre iba a estar cerca tuyo, protegiéndote. Quería que supieras que te iba a amar por siempre.
Aunque no pudieras verme, sé que pudiste escuchar todo eso que te dije.
Hoy ya ha pasado un tiempo y, aunque extraño el roce con tu piel, el perfume de tu pelo; aquí no duele el cuerpo, aquí soy libre como nunca. El sol nunca se esconde en ningún cielo. No hay horizontes ni tiempo. No es como dicen, es mejor aún a todo lo que puedas imaginarte.
Ya no llores. Cada lágrima que cae de tus ojos salpica mi alma. Ya no sé como hacer para que sonrías de nuevo. Te envié tantas cosas para que supieras que, aunque lejos, sigo escuchándote .Y esa noche, esa última noche acariciando tu pelo, no quise asustarte, lo siento, no pude contenerme, estabas tan serena… quería recordarte así, por siempre.
Ya no llores. Poco a poco irá pasando lo que sientes; y ese dolor, del que me contaste la otra noche, verás, si te detienes y cierras los ojos, encontrarás la repuesta. Lo que buscas está ahí, dentro tuyo, esperando que notes su presencia. Detente. Encuéntrate y lo encontrarás. Verás que no todo debe hacerse tan de prisa, que algunas decisiones pueden cambiarte la vida, pero son necesarias.
Sonríe. Vive. Ama. Grita cuando callen tu voz y guarda silencio cuando estés equivocada. No lastimes a nadie en el camino; todos nos volvemos a encontrar tarde o temprano y estamos hecho de lo mismo. No lamentes lo que hayas hecho, no seas tan dura contigo. Tente un poco de paciencia. Entiende que cada amanecer, es una nueva oportunidad para ser feliz. De eso se trata.
Ya no llores.
P.D.: Aún te amo.
Daniela C. Mazza (26)
Abogada
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